El partido del domingo a las 18h30 contra el Betis en la BMB puede ser histórico. El MoraBanc Andorra puede sellar la clasificación para la Copa del Rey si derrota al Real Betis Energía Plus en el último partido de la primera vuelta. De hecho, la Copa está definida y sólo falta saber cuál será el octavo clasificado. Y lo será el MoraBanc Andorra o el Retabet Bilbao Basket o el mismo Betis. Sin que ello sea garantía de nada, y menos en el deporte de élite, quien lo tiene mejor somos nosotros. Pero hay que rematar la faena.
Una victoria de los de Peñarroya manteniendo la imbatibilidad en casa significa seguro el billete para la Copa sin depender de nadie más. Las posibilidades en que quedamos fuera pasan todas por la derrota. Expliquémoslo.
En caso de perder el partido, el MoraBanc acabará la primera vuelta con 8 victorias. Las mismas que el rival del domingo y en caso de empate se desempata a partir del average general. Si el Betis quiere ir a la Copa debe ganar en la Bombonera por 38 puntos de diferencia. Los andaluces vienen enrachados y sin duda lo intentarán. El otro equipo en discordia es el Retabet Bilbao. Los vizcaínos tienen menos 11 en el average con el MoraBanc Andorra. Por tanto, y en caso de derrota tricolor, no tienen más remedio que ganar su complicado partido en la pista del Baskonia y una vez hecho esto esperar que la diferencia de puntos les acabe resultando favorable.
La descripción de las opciones es la misma y de los tres equipos que luchan por la octava plaza, el MoraBanc Andorra es quien lo tiene mejor. Pero no hecho. Habrá que hacer otro gran partido para mantener la BMB como fortín inexpugnable. “La semana la debemos preparar para ganar el partido, que será muy difícil. Como cualquier otra semana y con la misma intensidad. Si ganamos estamos en la Copa y este es el único mensaje “, manifiesta el entrenador Joan Peñarroya.
El BCA tiene un único precedente en Copa del Rey. La temporada 1994-1995, el solvente equipo que dirigía Eduardo Torres y lideraban en pista Jou Llorente y Ricky Brown jugó los cuartos contra el Estudiantes. Pletórico de ilusión, aquel Festina Andorra perdió el último segundo con un triple de Alberto Herreros. El Estudiantes se proclamó campeón de aquella Copa disputada en Granada. Aquella temporada el Festina terminó también octavo y se clasificó para el play-off y para jugar competición europea