Sólidos, firmes y sobre todo intensos. Así estuvieron ayer los hombres de Joan Peñarroya en el partido que coincidió con el Dia de la Constitució. El MoraBanc Andorra sumó su séptima victoria de la temporada superando por 73 a 58 el Iberostar Tenerife.
El equipo andorrano mostró desde el primer momento a su rival que ganar en la BMB sería muy caro. Y todo fue desde atrás. Con el partido bien estudiado y con todos los jugadores en línea con la idea de no permitir que los canarios jugaran cómodos. Y las ventajas fueron cayendo como fruta madura. De hecho el Morabanc Andorra ganó los 4 cuartos ayer, algo inusual en una temporada que está resultando complicadísima. Al final del primer cuarto la ventaja era 15-10, a decanos 37-30, al finalizar el tercer periodo 46-36, hasta el marcador final de 73-58.
A título individual, un día más Stojanovski volvió a mostrar que en los momentos calientes se mueve como pez en el agua y pidió la pelota siempre que quemaba. El macedonio acabó con 17 puntos. Desde los Balcanes Bogdanovic prestó una buena ayuda con 15 puntos más. Pero el partido y la forma en que se resolvió puede resultar muy importante para el grupo por la recuperación de Víctor Sada, que fue el jugador por el que se había apostado el pasado verano. El ex jugador del Barça anotó 12 puntos, cogió 7 rebotes y repartió 4 asistencias además de remar y mucho en defensa.
La lectura del ritmo que convenía al equipo fue otro de los elementos destacados del partido de ayer. El Iberostar Tenerife es temido en la liga por sus rachas anotadoras pero ayer no mandar en el partido en ningún momento.
Victoria sólida y esperanzadora que permite al MoraBanc Andorra dormir fuera de la zona de descenso y poder enfocar con confianza la recta final de la temporada en la dura lucha por la permanencia.