Derrota extraña en Bilbao. El 84-72 final no sirve para explicar el desarrollo del partido. El MoraBanc se desinfló inexplicablemente en el último cuarto tirando por tierra el excelente trabajo realizado en los tres primeros. De hecho, el parcial del último cuarto fue 28-11 para los locales, guiados por el andorrano Quino Colom, que tuvo una actuación estelar.
El partido comenzó con cruce de espadas y con la sensación de que el MoraBanc tenía el encuentro muy bien preparado. Navarro comenzó a gran nivel pero enseguida encontró apoyo en Beto, la dirección de Sada y el gran nivel de Luka Bogdanovic. El buen trabajo en defensa conjugado con las aportaciones de casi todos los jugadores permitieron ir consolidando ventajas por debajo de los 10 puntos. Al descanso se llegaba con 43-48, una diferencia que no hacía del todo justicia al buen juego del equipo andorrano. El tercer cuarto empezó con reacción local guiada por un buen Mumbrú. El marcador se llegó a dar la vuelta pero el MoraBanc Andorra mostró personalidad y solidez y al final del tercer cuarto habían vuelto los 5 puntos, 56-61. Buenas vibraciones. Actuación destacada en un escenario de nivel. Pero inexplicablemente se fundieron los plomos. Un par de decisiones arbitrales de color casero derivaron en protestas y una técnica en Sada. Y el equipo lo notó mucho. Demasiado. 3 puntos en 5 minutos.El camino fue plácido hasta el final para el Bilbao Basket.
El sábado a las 21h, la BMB vivirá un partido importante contra el Gipuzkoa, un rival directo de la parte baja de la clasificación.