El BC MoraBanc Andorra ha anunciado la puesta en marcha de su Protocolo de uso responsable de las pantallas en el deporte de formación. De la mano de Andorra Telecom y asesorados en todo momento por profesionales del área infanto juvenil de salud mental del SAAS ve la luz un proyecto que se lleva trabajando mucho meses.
Desde entonces, el club ha organizado charlas a cargo de Jordi Camós, experto en bienestar digital, con el fin de concienciar a entrenadores/as, jugadores/as y a sus familias. Una tarea tanto o más importante que el propio Protocolo.
Aceptando que los dispositivos electrónicos forman parte del día a día de los niños y adolescentes, y aprovechando la campaña de Andorra Telecom “Un mòbil, Un pacte”, el Bàsquet Club MoraBanc Andorra quiere promover un uso responsable y consciente de la tecnología, especialmente en un entorno donde el deporte y la convivencia deben ser los protagonistas.
El director de baloncesto formativo del club, David Eudal, explica que: “Tal y como les hemos explicado a nuestros jugadores y jugadoras, este protocolo contiene unas normas para reducir el tiempo de uso de los dispositivos, pero la intención final es que ellos y ellas, por voluntad propia, acaben aislándose del móvil para disfrutar con los amigos y amigas de todo lo que rodea una jornada de baloncesto”.
Desde Andorra Telecom, el director general, Jordi Nadal, ha destacado: “el paso adelante que da el Club con el desarrollo de este protocolo, que establece un marco de actuación para un uso más adecuado y responsable de Internet y de las redes sociales entre los equipos base fuera de la pista de juego. Celebramos que la campaña de nuestra compañía, “Un mòbil, un pacte”, haya contribuido a impulsar esta iniciativa”. Además, Nadal ha añadido: “Esperamos que otros clubes y federaciones que trabajan con niños y jóvenes sigan el camino empezado por el Bàsquet Club Andorra”.
Más allá del rendimiento deportivo, el BCA quiere ser una ILLA donde sus deportistas adquieran unos hábitos saludables fuera de la pista de juego y cuidando aquellos espacios comunes del club: los entrenamientos, los vestuarios, los viajes, los encuentros… Espacios que forman parte de la educación integral de nuestros jóvenes, más allá del rendimiento deportivo.
Cada espacio del club tiene un valor educativo, y queremos ayudar a los jóvenes a aprender cuándo toca estar conectado y cuándo no.
Entrenamientos y partidos: En la pista, ni selfies ni mensajes: sólo juego, esfuerzo y coraje.
Vestuarios y duchas: Lo que pasa en el vestuario, se queda en el vestuario.
Viajes y desplazamientos: Cuando viajamos, conectamos con el equipo, no con la Wi-Fi.
Gradería, banquillo y actividades de equipo: En el banquillo también se juega: se anima, se observa y se crece.
Comidas y encuentros compartidos: Aquí se come, se ríe y se habla. No hace falta cobertura.
Comunicaciones y redes sociales: Publica con respeto, responde con criterio.
El uso del móvil no depende sólo de la edad, sino de cómo nos relacionamos con el mundo, con los demás y con nosotros mismos. A medida que los chicos y chicas crecen, también aprenden a decidir mejor cuándo toca conectar pero sobre todo cuando vale más desconectar. Como club, adaptamos las propuestas y el acompañamiento según el momento madurativo de cada etapa:
Preminis y Minis (hasta 11 años): Las emociones, mejor vivirlas en directo.
Infantiles (12 y 13 años): Lo más importante no pasa nunca en la pantalla.
Cadetes y Juniors (14 a 18 años): Saber cuándo desconectar también es crecer.