El MoraBanc Andorra ha perdido hoy por 94-88 en la pista del Real Madrid en un partido que se puede analizar de forma muy diferente si se quiere ver el vaso medio vacío o medio lleno. En cualquier caso los tricolores han vuelto a ofrecer resistencia el gran favorito de la competición llevándolo al límite y obligándole a sacar a pasear sus mejores armas. Este activo de ser perseverantes y destacados que tanto dio la temporada anterior parece seguir acompañando al equipo unos meses y 6 fichajes después.
Quien quiera ver el vaso medio lleno remarcará la reacción de la segunda parte y la capacidad del equipo para sobreponerse a momentos realmente malos. En esta parte del análisis también encontraríamos la personalidad para desafiar un conjunto tan lleno de argumentos como el Real Madrid.
En la parte del vaso medio vacío se puede decir que al final el partido se ha vuelto a escapar y que la primera mitad se ha permitido a los blancos jugar muy cómodos y acabar anotando 50 puntos. Por otra parte la diferencia en el rebote ha sido demasiado grande, en particular en el primer tiempo con un masa visible 27-9 (41-22 al final).
A título individual. Blazic ha asumido responsabilidad desde un buen inicio terminando con 20 puntos. El jugador más valorado del equipo ha sido David Walker con 16 anotando 13 puntos. Oliver Stevic y Moussa Diagne han valorado 21 cada uno.
El partido comenzó cuesta arriba para los tricolores. Rápido, intenso y con las ideas claras el Real Madrid ha conseguido ventajas con rapidez. Fabien Causeur ha terminado con 28 de valoración y ha sido siempre el líder ofensivo y a nivel de la toma de decisiones de los de Laso. Al final del primer cuarto, 26-18 y la sensación era que eran 8 puntos y gracias. En una sola jugada el Madrid ha tenido 4 tiros gracias a sucesivos rebotes. Demasiada ventaja. La jugada, por cierto, ha acabado con triple de Causeur. El segundo cuarto ha sido una pesadilla con la sangría en el rebote como principal protagonista. El marcador se ha llegado a estirar hasta el 37-21. Al descanso 50-35.
Y en el tercer cuarto las cosas han cambiado. El MoraBanc Andorra se ha ajustado detrás. Ha jugado más duro, más concentrado y ha encontrado más acierto exterior. Todo ello ha dado como consecuencia que las cosas se equilibran. Al final del periodo 63-60. Espadas elevadas, totalmente. El último cuarto el Madrid ha recuperado la mejor versión (anotó 31 puntos) y la réplica tricolor no ha sido suficiente a pesar de llegar a generar la duda y el sudor frío en la recta final con los puntos de Blazic.
Derrota para empezar pero esto no se detiene. Ni mucho menos. Miércoles a las 21h debut en la Bombonera contra un excelente Montakit Fuenlabrada.