Hace 8 días exactos el MoraBanc perdía un partido de aquellos que hacen daño sobre todo por la manera y por la imagen que dio el equipo. La diferencia, cercana a los 30 puntos en Santiago, fue un pellizco en el orgullo del equipo. Sólo así se explica la cara sobresaliente de los últimos dos partidos y la espectacular victoria de hoy por 86-81 contra un Herbalife Gran Canaria que es uno de los mejores equipos de la segunda vuelta y que ha vendido muy cara la derrota. Y es que hoy los tricolores no sólo han sido físicos, intensos y agresivos en pista (el libretto previsto para la temporada) sino que también han sido sólidos en los momentos en que los visitantes se han cogido fuerte al partido. Aparte de esto, hoy también se puede destacar que la negra noche de hace 8 días en Galicia, deja paso a una nueva etapa de ilusión para el equipo. Y es que faltando 4 partidos por disputar, el MoraBanc tiene más que otros equipos porque tiene duelos aplazados, aun es posible pensar en sacar la cabeza en los puestos de playoff cuando termine la liga regular. Nada sencillo, seguro. Los de Ibon Navarro visitan el miércoles Málaga y el sábado Murcia. Y la próxima semana tocará ir al Olímpico de Badalona para cerrar en casa contra Acunsa Gipuzkoa. El calendario es bien complicado pero tal y como han ido las cosas esta temporada llegar a la recta final con licencia para soñar es una noticia fantástica. Hoy hay que decir que la mirada del equipo, ya desde los primeros instantes ha quedado claro que bebía de las fuentes que lo alimentaron contra Urbas Fuenlabrada. No es menos cierto que encontrarse enfrente un equipo con la confianza con que llegaban los canarios lo hacía todo mucho más difícil. Descansando sobre un rebote ofensivo salvaje el MoraBanc ha dominado la primera parte llegando al descanso 40-33 y con buenas sensaciones. El enemigo visitante era claramente AJ Slaughter, una maravilla generando y finalizando (acabó con 19 puntos). En la reanudación Herbalife ha puesto en marcha su cara más coral, ha ajustado la defensa y ha ganado el tercer cuarto pero sin poder dar la vuelta. Hannah no quería. Hannah no quería permitir bajo ningún concepto. Y cuando el pequeño base se pone así, el rival ya puede orar. Hannah ha valorado hoy con 22 puntos y 7 asistencias. A pesar de la resistencia de los de Porfi Fisac porque hoy había mucho en juego, el MoraBanc ha ido ligando cada tramo de partido con mano maestra. No sin sufrir, porque se ha sufrido, pero nadie podrá decir que el MoraBanc no ha merecido la victoria. Y, además, bajo la batuta de Hannah otros instrumentos han sonado en grande. Tunde valoró 22 con 13 puntos, 7 rebotes y un gran acierto desde la línea de personal en los últimos minutos. Jelínek ha hecho 15 puntos y Senglin 10 pero realmente la fuerza hoy ha sido la energía mostrada por el equipo desde el primer segundo. Hasta donde dará esta energía? Pues de momento para acabar ilusionados la temporada más complicada y desconcertante de nuestra historia. Y no es poco.