Derrota del MoraBanc Andorra en la pista del TD Systems Baskonia por 84-67 en uno de esos partidos en los que no hay demasiado que decir desde la perspectiva del perdedor porque la victoria local ha sido totalmente justa. El campeón de liga ha ido ajustando sus tentáculos paulatinamente sobre un MoraBanc Andorra que ha empezado muy bien, con determinación y acierto, 12-20 y 18-23 a final del primer cuarto. La sensación es que Baskonia iba entrando en partido paulatinamente consciente de su superioridad y esperando el momento en que el partido hiciera un click favorable a sus intereses. Y el click ha llegado en el segundo cuarto por dos motivos. Uno ha sido sellar el acierto tricolor desde el perímetro y el otro el partido sensacional que ha hecho Yousoupha Fall que ha acabado con 38 de valoración gracias a los 17 puntos, 14 rebotes y 4 tapones. El gigante de 2.21 ha dominado el partido al estilo de Tavares y eso para él es un elogio porque no siempre se ha encontrado tan cómodo, Parakhouski ha debutado con dos puntos pero se le ha visto lógicamente falto de conexión con los compañeros y lo mejor que se puede decir de él es que ha sido una víctima más del poder de Fall. Al descanso las cosas estaban 42-37 pero la tendencia del partido ya había girado y los de Ivanovic controlaban el partido. La siempre admirable capacidad para no rendirse del MoraBanc ha visto durante todo el tercer cuarto. Es un posicionamiento terco a pesar de las dificultades que mantiene vivo al equipo en los partidos aunque no esté demasiado fino. Y esto ha durado hasta el arranque del último cuarto. Se ha entrado en el último periodo con 61-53 y el MoraBanc, con unas cuantas buenas defensas, ha sido capaz de estirarse hasta el 61-56. Pero la buena defensa local y la falta de acierto o de claridad del ataque tricolor ha terminado por frustrar el habitual esfuerzo del MoraBanc. Los de Ibon Navarro han cedido en la recta final y los 17 puntos de diferencia son la muestra de lo que te puede pasar si no vas con el cuchillo en la boca los 40 minutos contra estos equipos. Y diciendo estos no nos referimos sólo a la condición de Euroliga del equipo de Vitoria sino, también, a que pasa por un momento dulce. La peor sensación para los jugadores es la de poner la máxima voluntad y no ser peligrosos para el rival, un punto en el que claramente hay mucho margen de mejora cuando la confianza reaparezca y el equipo ya esté al completo. Hoy el mejor, de muy largo ha sido Senglin que ha valorado 23 y ha hecho 20 puntos. Tiempo para cicatrizar habrá poco. El equipo viaja ya a casa por qué el lunes a las 18h30, en la BMB, el rival es el líder de la liga, el Real Madrid, que ha derrotado al Tenerife en su casa hace un rato, con remontada incluida. Será difícil ganar, seguro. Imposible, seguro que no es.