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El MoraBanc Andorra ha ganado esta tarde por 83-70 al Bueno Arenas Albacete en una Bombonera que ha vuelto a vivir una fiesta del baloncesto. Y es que antes de ir al partido quizá qe dediquemos un momento a hablar de la energía positiva que se vive en todos los partidos que los tricolores juegan como local. Quizás todo se reduce a que ganando todo es voz de color de rosa pero no hay que dejar de mencionar lo bueno de la vida y cada partido en la Bombonera es una auténtica fiesta. Hoy el partido es de esos que el periodismo ha acabado calificando de trampa. Y a menudo las trampas son muy peligrosas y por el equipo que se supone que debe ganar son difíciles de desactivar. El Albacete, por varios problemas de lesiones, hoy se ha presentado al partido con solo 8 fichas del primer equipo y de esta precariedad ha hecho bandera para unirse y llegar a exprimir el límite de sus posibilidades. Y ese punto de resiliencia convertía hoy a los visitantes, un equipo que lucha por la permanencia, en un rival peligroso. Y aunque el MoraBanc trabaje duro el estado de alerta esta clase de situaciones, no se sabe cómo acaban flotando dentro del partido, y pueden generar algo de ansiedad si el partido no acaba de resolverse con cierta claridad. El MoraBanc ha trabajado correctamente en este contexto jugando un partido en el que quizá le ha faltado un punto de ritmo. No demasiado más porque al igual que otros días los tricolores han sabido poner oficio y dureza para no dejar creer a los visitantes que podían pasar de hacer un papel digno. Esto y Johnny Dee, que ha hecho 24 puntos con 6 triples. La metralleta californiana ha sido la conexión con el brillo que siempre se necesita para decantar un partido ante un rival incómodo como el Albacete. Rafa ha repartido 6 asistencias, Maric ha cogido 10 rebotes y Felipe I Andric también han tenido contribuciones positivas. Yendo al partido los visitantes se han marchado al final del primer cuarto dominante por 17-19. Con un juego pausado, mucho tiro de 3 y las cosas muy claras los manchegos dejaban claro al MoraBanc que tocaba currar. Y los de Lezkano se han puesto. El segundo cuarto fue el mejor en clave tricolor con un 41-30 que podía parecer la rampa de lanzamiento por una victoria contundente. Nada de nada. Albacete no ha dejado que el partido se volviera loco en ningún momento. Y sólo en una ocasión, ya en las postrimerías, ha estado por debajo por más de 20 puntos de diferencia. E incluso en este tramo ha encontrado acierto para acabar perdiendo por 13 y poder decir que ha terminado de pie a pesar de las circunstancias. Tras esta victoria, 18 triunfos y 2 derrotas hasta ahora en la liga y ahora toca pensar en la gran cita del próximo sábado en Palencia con la disputa contra el equipo local de la Copa Princesa.
