Apuntaba a partidazo y lo ha sido. Lo que pasa con los partidazos es que si no los ganas no alimentan nada. Y eso ha ocurrido. La victoria del Montakit Fuenlabrada en la BMB por 80-89 deja un mal sabor de boca por qué en el último cuarto el equipo de Peñarroya ha estado muy desafortunado anotando sólo 9 puntos y perdiendo 6 balones.
Esto afecta mucho el análisis final de un enfrentamiento que ha sido un bonito cruce de espadas durante 3 fantásticos cuartos. Incluso se puede decir que en el salvaje combate que había en pista, el MoraBanc ofrecía la sensación de ser capaz de poder hacerse con el encuentro. Si la derrota se puede resumir en un nombre propio es el de Jonathan Tabu, el base congoleño con pasaporte belga del Fuenlabrada ha anotado 34 puntos con 7 triples, 6 asistencias y 34 de valoración. Una exhibición mayúscula en la que se ha apoyado su equipo, rebelde y contestatario siempre.
La primera parte ha acabado 52-50 y ha sido un festival ofensivo. En parte por qué los ataques se imponían a las defensas, en parte porque había acierto y determinación por parte de los dos equipos. Sin embargo la iniciativa siempre ha sido del MoraBanc. El 9-5 inicial en muy poco tiempo de juego transmitía que el partido prometía. Los hombres de Peñarroya se han llegado a poner 23-17 pero siempre contestaba Tabu, que ya había comenzado su demostración. Bogdanovic (que acabó con 17 puntos y 19 de valoración) comandaba las operaciones. Los primeros 10 minutos han acabado 30-27. Una ventaja local que se ha mantenido durante el segundo cuarto.
La buena salida de los andorranos, con un buen Stojanovski y un excelente Jones ha hecho estirar la diferencia hasta el 44-35. Pero el Fuenla no estaba groggy, ni mucho menos. Tabu ha ido encontrando socios en Urtasun y Paunic, cómplices del espíritu irreductible de los madrileños. Al descanso, 52-50 con el público disfrutando mucho.. Las cosas han cambiado en la reanudación. Todo se ha vuelto mucho más complicado. Ambos equipos han parecido decodificar el motivo del festival de puntos de los dos primeros periodos. Pero a pesar de cambiar la dinámica, lo que no se ha movido ha sido el liderazgo en el marcador. El MoraBanc se ha adaptado a esta nueva versión, más metalúrgica y concluyó el cuarto mandando por 70-68. Como en los grandes combates de boxeo clásico, los dos púgiles recibían y daban golpes pero se mantenían en pie.
Y al final, quien ha mostrado tener la mandíbula más frágil ha sido el equipo andorrano. El Montakit Fuenlabrada ha subido la defensa y ha encontrado canasta con mucha más facilidad que el MoraBanc, que ha sido tres minutos seguidos sin hacer canasta. Urtasun ha puesto el 75-76 en el electrónico en la primera ventaja visitante desde el primer cuarto. El encuentro ha estado en 75-78 dos minutos y medio. El regreso de Shermadini (acabó con 19 de valoración) no ha sido solución. Y al final, Tabu ha seguido siendo el gurú del éxito de sus compañeros. El 80-89 final con un triple sobre la bocina no explica lo que ha sido el encuentro pero sí concede el Fuenlabrada la etiqueta de justo vencedor por haber hecho más en los momentos claves. El MoraBanc Andorra visita el próximo domingo la pista del Retabet Gipuzkoa, último clasificado de la Liga Endesa.