No pudo ser. El Valencia Bàsket pudo elevar a 15 su racha de victorias conquistando la Bombonera por 78-86 en un enfrentamiento vibrante disputado con un ambiente increíble. El resultado al descanso era 44-44. Al final del tercer cuarto 62-62 y la derrota final se explica por la gran cantidad de recursos de los taronges y por el aumento de la tensión defensiva en el tramo final del partido. Por ello y tal vez un poco también porque el criterio arbitral no pareció ser del todo equitativo en momentos claves. “No ha habido el mismo criterio en el último cuarto, aunque no voy a decir que hemos perdido por culpa de los árbitros” manifestaba Peñarroya en rueda de prensa.
El inicio del partido dejó las cosas claras. Era un día para valientes y que no se atreviese mejor que no saltara al parqué. Alta tensión en el contacto e intercambio de golpes en el que el MoraBanc Andorra se mantenía siempre firme. Bogdanovic ha sido el faro con Beto en el primer cuarto. Detalles de Shermadini, que ha jugado sólo 18 minutos porque se ha cargado de faltas, han sido los protagonistas del juego local. Al final de los primeros 10 minutos, 20-23 y las espadas bien elevadas.
El segundo cuarto ha mantenido la misma tónica y ha aparecido un secundario que ha reclamado paso enseguida, Shawn Jones. Guiado por el acierto del jugador norteamericano el MoraBanc ha sido capaz de liderar el marcador durante este periodo. Las sensaciones eran buenas. El Valencia mostraba su amplio arsenal, al inicio con Hamilton y luego ya de forma más coral, pero el equipo de Joan Peñarroya no retrocedía ni un milímetro. Al descanso el 42-42 auguraba grandes cosas. Y llegaron, Con los mejores minutos de Shermadini, el MoraBanc se ha plantado en un 57-53 que esperanzaba a los aficionados locales en una BMB encendida como nunca. Pero el Valencia ha aumentado la intensidad defensiva y el ataque del MoraBanc tuvo más problemas para encontrar soluciones. Al final el 62-62 dejaba claro que estábamos ante una gran batalla.
La grada cantaba infatigable ‘sí se puede, sí se puede’ y había que ver qué respuesta le quedaba todavía al equipo. Y le quedaba, sobre todo a Bogdanovic, pero el primera arañazo fue visitante. 64-68. Un aviso. El mal partido del siempre presente Stojanovski fue un lastre importante para un equipo andorrano necesitado de magia para hacer frente a la potencia naranja. La fe del equipo y su constancia defensiva han permitido que la llama se mantuviera viva hasta casi el final.
Pero al final el Valencia se ha despegado. Han sido minutos en los que pareció que los contactos no pesaban igual en las dos botellas y en el que en un par de ocasiones el trío arbitral no ha parecido muy acertado en varias apreciaciones. Y el encuentro, que había sido vibrante durante 38 minutos y medio, ha tenido un final más tranquilo de lo previsto. Dubljevic ha sido el mejor del partido con 21 puntos de valoración y por parte local tres jugadores han valorado igual, 18 puntos. Beto, Jones y Shermadini han hecho contribuciones notables. El mejor anotador fue Bogdanovic con 16 puntos.
El próximo sábado el MoraBanc Andorra vuelve a jugar en casa, a las 21h, contra Baloncesto Sevilla.