Derrota del MoraBanc Andorra en Badalona. El 74-59 final es un buen retrato de los merecimientos de unos y otros. Hacía mucho tiempo que los locales tenían ganas de sumar una victoria contra el MoraBanc y este mediodía lo han conseguido justamente. El Divina Seguros Juventud ha sido quien más ha hecho, de largo, para llevarse el triunfo confirmando punto por punto todas las advertencias hechas por Peñarroya reno la previa del partido. A menudo sucede que la clasificación no describe el momento por el que pasa un equipo y es bien cierto que los Verdinegro saben a qué juegan y hoy han usado al límite sus recursos para imponerse. El Joventut ha sido especialmente hábil para cortocircuitar el juego alegre y dinámico de los tricolores. Muy desacertado en el lanzamiento el mal partido del Morabanc se puede recoger en el 19 de 44 hecho en tiros de dos o aún más en el segundo de 16 en triples. En el baloncesto actual, ganar un partido cuando se tiene un día tan malo desde el perímetro es casi una quimera. A título individual sólo se puede rescatar el 15 de valoración de Shermadini, o los 10 puntos de Navarro y Stevic. Más que la derrota, que entra totalmente en las posibilidades en una liga tan equilibrada, lo que más sorprende del partido de hoy es la distancia del equipo respecto la sinfonía perfecta que fue el equipo hace sólo una semana en Gran Canaria .
El partido no obstante, ha comenzado bien. Y parece que, por mucho que pueda parecer lo contrario, esto no le ha ido bien al MoraBanc Andorra. Las sensaciones, la seguridad, la variedad en el juego, ofrecían total confianza en los primeros minutos. 8-12, 14-19 … las ventajas iban cayendo y eran el reflejo de la superioridad en pista de los tricolores. Pero lamentablemente ha sido un espejismo. Hoy el equipo de Peñarroya ha tenido mandíbula de cristal. Lo que le decían a los boxeadores que no sabían encajar. El Joventut primero equilibró el partido, 18-19, al final del 1Q y después ha puesto la directa, 29-21 en un gran arranque de segundo cuarto. El MoraBanc miraba el partido extrañado porque sintiéndose superior estaba bastante por debajo. En el descanso, una leve mejora de los andorranos ha llevado el 36-34 en el electrónico.
La expectativa para el segundo tiempo era ver como entraban unos y otros. Y aunque el equilibrio, la Peña ha sido quien quería ser hasta el final ante un MoraBanc incómodo sin capacidad para disfrutar en pista. A pesar de los esfuerzos para hacer girar el partido, la tendencia estaba bien marcada ha sido así hasta el final. El 3Q lo dejaba todo en alto. Se podía esperar un pronto final. Pero ha sido al contrario. Las estrecheces de ir por detrás y no ser capaces de remontar han acabado conducido los de Peñarroya a la frustración. Sobre todo porque han visto la anilla muy pequeña. El Joventut, por el contrario, presentaba definitivamente en sociedad el joven de 18 años Dimitrjevic, que ha sido fantástico con 18 de valoración.
La vida continúa y con retos de altura, de los bonitos. Como intentar ganar el próximo domingo 12h30 en la BMB, una potencia continental como Baskonia.