Victoria del MoraBanc Andorra (72-67) en la Bombonera ante Gipuzkoa esta noche en un partido sufrido y áspero en los que los de Natxo Lezkano han sido capaces de encontrar los mecanismos para ser suficientemente competitivos para ganar pese a estar pasando por un tramo de la temporada en la que no fluyen en ataque. Y eso nunca acabas de saber en qué porcentaje es responsabilidad propia o del rival. Hoy el Gipuzkoa venía a Andorra con la etiqueta de ser el único equipo que había derrotado al Palencia hasta ahora y se ha pasado el partido demostrando el porqué de esta carta de presentación. Los de Lolo Encinas llevaban estudiado al milímetro el MoraBanc Andorra y han hecho una apuesta desde el inicio a retar a los tricolores a tener un buen día de fuera. Y por lo que sea, no es sencillo tener una respuesta, el MoraBanc lleva unas semanas en las que está viendo el eslabón pequeño desde más allá de 6.75 (hoy 7 de 23). En un buen día desde el triple los visitantes hoy hubieran clavado la rodilla en el suelo mucho antes pero lo cierto es que los vascos han sido bien enganchados a los de Lezkano hasta el último minuto. La buena noticia, y es mucho mejor de lo que parece, es que esta versión más gris y poco brillante del MoraBanc Andorra tiene capacidad para remangarse y ponerse a trabajar cuando toca. En una liga tan disputada como Leb Oro la ilusión de un desfile por la competición era justamente eso, una ilusión. Bien es cierto que ganar 15 partidos de los 17 disputados puede llevar a engaño pero el tema es más complejo que todo esto. El MoraBanc está donde está porque está sabiendo asumir varios registros y a partir de ahí seguir sumando. Con el talento que tiene el equipo se puede pronosticar que pronto el equipo se desatascará pero mientras esto no ocurre hay que hacer caja todo lo posible, y hoy contra un gran rival ha sido el mejor ejemplo. Aparte de hablar del partido hay que mencionar que hoy ha terminado la primera vuelta y que el Palencia ha terminado primero con una victoria más, ventaja por la que organizará la Copa Princesa en casa. El MoraBanc está excelente hasta ahora y el Palencia extraordinario, está siendo y será un duelo muy bonito.
Yendo al partido el campo de minas visitante ya ha sido plantado desde el inicio. El 15-25 del primer cuarto explicaba perfectamente lo que ocurría. Allí donde quería ir el MoraBanc ya le estaban esperando. En ataque y defensa. El ritmo era pesado por el partido y no había alegría. En el segundo cuarto el orgullo de Rafa Luz ha levantado al equipo, que poco a poco se ha puesto a defender. Y lo que subía no ha acabado de bajar pero la pendiente se ha empezado a hacer menos dura. La tendencia del partido se ha dado la vuelta y se ha pasado al equilibrio. 35-38 en el descanso. Y ese equilibrio se ha mantenido hasta el final pero ya con la sensación de que una buena racha del MoraBanc podía romper el partido. Pero no ha llegado. Marin Maric (MVP hoy) ha mantenido al equipo en los malos momentos y ha ido recibiendo ayuda de Rafga, Andric y Speight. El 53-50 de final del tercer cuarto podía dejar paso al optimismo, pero el partido no dejaba de ser igualado y Gipuzkoa no ha dejado de tener opciones en ningún momento. Finalmente el MoraBanc ha tenido más madera para quemar y ha cerrado con coraje y buena organización el eslabón propio. La victoria se ha quedado en casa y ahora hay que seguir trabajando y mejorando para hacer compatible lo antes posible esta alma currante de los de Lezkano con la liberación del talento del equipo. El próximo sábado nuevo partido en casa contra el Tau Castelló (18h).